martes, 3 de mayo de 2016

DEAD AND BURIED


Dead and Buried – Gary Sherman - Estados Unidos
7/10 

Potters Bluff es, en apariencia, un tranquilo pueblo pesquero. Los lugareños se reúnen a charlar y emborracharse en la cafetería del pueblo y, de vez en cuando, a matar a algún que otro turista mientras le sacan fotos. ¿Spoiler? Tranquilos, lo que os acabo de narrar ocurre en los primeros minutos del film y no desvela secreto alguno. Todas y cada una de estas muertes serán enmascaradas como distintos tipos de accidentes. El sheriff Gillis (James Farentino) será el encargado de resolver las, cada vez más frecuentes, muertes acaecidas en el pueblo. Con guión de Ronald Shusett y Dan O'Bannon, el tandem responsable del guión de 'Alien', y dirección de Gary Sherman ('Raw Meat', 'Poltergeist 3'), en 1981 se estrenó 'Muertos y Enterrados'. Concebida por Sherman en un primer momento como una comedia negra, la película fue perdiendo su tono cómico en pos de uno más 'gore' debido a exigencias de parte de los productores. El mostrarnos desde el primer momento quienes son los asesinos no le resta ni ápice de interés a la película, es más nos coloca en una posición privilegiada respecto a su protagonista y nos dará la sensación de ir un paso por delante en la investigación. Esto no llega a ser del todo cierto, puesto que no podemos saber cuantos de los vecinos de Potters Bluff están metidos 'en el ajo', estableciéndose así un juego de sospechas con cada nuevo personaje que aparezca en pantalla. Destacar entre todo el reparto a Jack Albertson, el cual interpretará a un forense obsesionado con la tanatopraxia y que jugará un papel muy importante dentro del film. También contaremos con la presencia de un joven Robert Englund ('V', 'Pesadilla en Elm Street') que dará vida a uno de estos 'simpáticos' paisanos. La fama adquirida por el film en cuestión no le viene solo por su calidad cinematográfica, sino en gran parte por el hecho de haber sido catalogado como un video nasty por la administración Tatcher. En definitiva, la película, aunque más sangrienta, goza de un estilo de producción similar al de títulos como 'Amityville', 'El misterio de Salem's Lot' o 'Pesadilla Diabólica', que tantas buenos/malos ratos nos hicieron pasar en sus múltiples pases en la pequeña pantalla. Adolece de cierta factura televisiva, dicho esto sin ningún tipo de acritud, que junto con sus giros de guión nos puede recordar a producciones de la pequeña pantalla como 'Twilight Zone' o 'Hammer House of Horror' entre otras. Pequeño clásico, desconocido por muchos, que hará las delicias de los amantes del género. Pasen y disfruten, si pueden, de su estancia en Potters Bluff.

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